Lo afirmó Francisco Rostán, economista del Instituto Nacional de la Leche (INALE) de Uruguay. Lo vinculó a la pérdida de mercados y de competitividad del sector quesero.
Francisco Rostán, economista que desarrolla actividades en el INALE, se refirió a la situación que enfrenta el sector lechero uruguayo, señalando que si bien desde el año 1985 al 2014 la producción “creció a una tasa de 4, 5 % acumulativa anual”, desde 2015 hasta la actualidad está “prácticamente estancada, con una tasa de crecimiento de 0,1 %”.
Tal situación, sostuvo, se debe a los “efectos de la pérdida del mercado de Venezuela y de competitividad en el sector quesero”. Igualmente, aclaró que la producción de leche en polvo evoluciona de manera positiva.
El economista señaló que en Uruguay hay 2300 productores remitentes, siendo 750 queseros artesanales. También existen 55 industrias transformadoras, de las cuales sólo 4 capturan más del 85% de la materia prima.
La lechería a nivel global tiene una clara tendencia hacia la concentración de tambos y en el país vecino se conoció recientemente que en un mes desaparecieron 20 tambos. Se le consultó a Rostán por ese hecho.
“Nosotros lo que hacemos es cuantificar la tasa de pérdida de tambo anual y lo comparamos internacionalmente; es preocupante si ocurre por encima de la tendencia mundial”, afirmó.
Añadió que en 2015 “la tasa de desaparición fue de – 6 %, es decir, muy alta en términos internacionales; pero en los últimos años esa tasa se ha desacelerado. Sigue habiendo una tendencia a disminución de los tambos y aumento de tamaño promedio, aunque eso ocurre en todo el mundo”.
Finalmente, y sobre los sistemas de producción que experimentan en el vecino país, señaló que “hay ensayos de cama caliente y se está relevando nueva información hacia los productores. Algunos de ellos están incorporando este tipo de tecnología, combinando el sistema pastoril con cama caliente”.
Nota escrita por Eugenia Amaya, estudiante de la Universidad Nacional de Villa María
