El director de Comunicación del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), Luis Fontoira, reflexionó sobre la posición que ocupan medios de comunicación y redes sociales en la actualidad, especialmente para el campo.
En el marco del Primer Foro de Comunicación Agropecuaria de Córdoba, COMAG 2022, el director de Comunicación del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), Luis Fontoira, presentó un tema interesante bajo un título muy sugestivo: «Cambios en la comunicación en la era de las fake news. ¿El fin del periodismo?».
Luego del encuentro, en diálogo con Cadena de Valor, el comunicador afirmó que según su visión la actividad está gravemente herida a partir de las nuevas herramientas digitales, ya que “murió el periodismo que se pontificaba desde un lugar, diciendo somos la comunicación. Actualmente no hay
manera de hacer algo transversal, como se hacía en otros momentos. Hoy la plataforma es el medio y son todas plataformas distintas”.
Y añadió: “Es necesario poder adaptarse a las nuevas formas de interacción que han traído las redes sociales. Hay que ser flexible, y pararse en el lugar clásico de la deontología del emisor”.
Desde su posición en el IPCVA Fontoira explicó cómo afrontan este desafío comunicacional, donde aplican la segmentación de mensajes para cada plataforma y utilizan la figura del influencer -antes conocida como líder de opinión- para llegar a nichos particulares.
“Estamos viviendo en este mundo de las redes sociales, en esta especie de Matrix, en donde cada grupo etario cuenta con su propia red de cabecera. El 86.3% de los argentinos las manejan; las redes dan una falsa sensación de libertad, pero en realidad la inteligencia artificial, que se llama algoritmo, es quien decide que ves y que no ves”, subrayó el director de Comunicación de IPCVA.
“El algoritmo distingue cuáles son tus intereses primarios y te pone en esa caja de cristal, la cual no te deja mirar hacía los costados. Esas burbujas no se conectan entre sí”, indicó el comunicador. También remarcó la dificultad de poder entrar en el campo de atención del público en general y “doblemente particular para el periodismo agropecuario ya que vivimos en sociedades urbanas, muy alejadas de
los conceptos de campo“.
Santiago Torres Ruartes – Estudiante UNVM
