La Bolsa de Cereales de Córdoba presentó su Informe de Mercados Agrícolas correspondiente a abril de 2025, con un análisis detallado sobre el comportamiento de los precios, la oferta y la demanda de granos tanto a nivel internacional como nacional.
El Departamento de Economía de la Bolsa de Cereales de Córdoba analizó el mercado de granos, poniendo el foco en dos cultivos clave para la economía argentina: soja y maíz, cuyas perspectivas muestran señales mixtas.
Soja: recuperación en EE. UU. y firmeza en el mercado local
En el plano internacional, el mercado de soja se vio influenciado por la mejora en las condiciones productivas de Estados Unidos. El USDA (Departamento de Agricultura de EE. UU.) ajustó al alza su estimación de stocks finales, lo que presionó los precios a la baja durante parte del mes. No obstante, la recuperación de la demanda por parte de China y otros países asiáticos aportó cierta estabilidad.
En Brasil, la producción de soja 2024/25 muestra signos de recuperación tras los impactos climáticos iniciales, lo que incrementa la oferta sudamericana en el mercado global.
A nivel local, los precios de la soja se mantienen firmes, apuntalados por la demanda interna de la industria aceitera y el repunte en los márgenes de exportación. La Bolsa de Cereales de Córdoba destaca que el mercado doméstico también se ve favorecido por un tipo de cambio competitivo y por políticas de incentivo a la liquidación de divisas.
Maíz: presión desde EE. UU. y desafíos logísticos en Sudamérica
En cuanto al maíz, el informe subraya que el mercado internacional enfrenta una baja en los precios, producto de una mayor oferta esperada en EE. UU. y la caída en los precios de exportación desde Ucrania y Brasil. Este contexto genera presión bajista para los países exportadores tradicionales, incluida Argentina.
Sin embargo, el mercado argentino encuentra ciertos puntos de apoyo. Por un lado, las demoras logísticas en Brasil y los bajos niveles de los ríos afectan la competitividad de los embarques sudamericanos, abriendo una ventana de oportunidad para los exportadores argentinos. Por otro, la producción nacional presenta signos de recuperación en comparación con la campaña pasada, aunque persisten problemas de financiamiento y costos elevados de insumos.
En términos de precios internos, el maíz muestra una leve mejora en las últimas semanas, impulsado por una mayor demanda del sector ganadero y de la industria del etanol.
