Por el estrés hídrico, la entidad redujo en dos millones de toneladas los números del maíz frente al anterior informe.
Cuando ya se lleva cosechado algo más del 10 por ciento de la superficie destinada al cultivo, la BCBA redujo su proyección de producción de maíz en 2 millones de toneladas. Vale decir que gran parte de lo recolectado corresponde a planteos tempranos, que fueron los más afectados por la sequía.
Por otra parte, lentamente comienza a cobrar impulso las labores de cosecha de soja sobre el centro del área agrícola. Los primeros resultados sobre ambos núcleos resultan contrastantes. Mientras que sobre el Núcleo Sur los rendimientos medios se mantienen cercanos a los promedios históricos, la falta de humedad durante gran parte del ciclo del cultivo sobre el Núcleo Norte afectó al cultivo en pleno periodo crítico generando una importante variabilidad y rendimientos promedio cercanos a los mínimos históricos.
