Buenas proyecciones para la producción de aceite y harina de soja

Tras la histórica sequía, se anticipa un significativo repunte en la producción de soja y sus derivados para el ciclo 23/24. Así se producirían 7,5 millones de toneladas de aceite y 29,1 millones de toneladas de harina.

Tras la campaña 2022/23 donde la producción de soja registró su menor volumen en casi tres décadas, se perfila en la 2023/24 una producción de 50 millones de toneladas, lo que representaría una recuperación interanual del orden del 150%, es decir, una cosecha y media más que el año pasado.

En un contexto de marcada caída de la actividad económica, este aporte del poroto de soja será de gran relevancia para el fortalecimiento de la agroindustria argentina, ya que permitirá que nuestro país mejore sus números de crushing de la oleaginosa, posibilitando una mayor producción tanto de aceite y harina de soja, como así también de biodiesel.

En relación con el aceite de soja, se espera que la mayor oferta de poroto permita una importante recuperación productiva. De acuerdo con estimaciones propias, el crushing de soja se ubicaría en la campaña 2023/24 en torno a los 39,6 millones de toneladas. De esta manera, el incremento con respecto a la campaña previa sería del 48% y quedaría un 8% por encima del promedio de las últimas cinco campañas.

Como resultado del procesamiento proyectado de poroto de soja permitiría que se produzcan alrededor de 7,5 Mt de aceite de soja, superando en 2,4 millones de toneladas al volumen producido en la 2022/23, y en casi 400 mil toneladas al promedio del último lustro. Con este volumen exportado, Argentina lograría sostenerse por vigésimo octavo año consecutivo como el mayor abastecedor de aceite de soja al mundo.

Por otra parte, se espera que se destinen 1,3 millones de toneladas a la elaboración de biodiesel, lo que significaría una recuperación del 69% respecto a la débil producción del ciclo 2022/23, estimada en 809.000 toneladas, la más baja en 15 años.

En cuanto a la producción 2023/24 de harina de soja se estima en 29,1 millones de toneladas, un aumento de 10 millones de toneladas con respecto a la campaña anterior, y 2,6 millones de toneladas por encima del promedio de los últimos 5 años, aunque aún 5 millones de toneladas por debajo del récord alcanzado en el ciclo 2014/15.

Para la campaña 2023/24, Argentina recuperaría su lugar de liderazgo como exportador mundial de harina de soja, luego del traspié de la 2023/24 cuando cedió el primer puesto a Brasil como consecuencia de la histórica sequía. Así, las exportaciones se proyectan en 28 millones de toneladas, un 51% por encima de la campaña anterior.