El Índice de Precios al Consumidor tuvo un repunte de 0,3% y alcanzó en julio 1,9%, retomando la tendencia alcista.
Con la suba del dólar registrada en las últimas semanas y el clima de incertidumbre política que siempre acompaña a los procesos electorales como telón de fondo, la inflación en Argentina tuvo un rebote y enciente la luz de alarma de cara a los próximos meses.
En un escenario electoral complejo, el IPC no fue la mejor noticia para el Gobierno nacional. El incremento del 1,9% en los precios, más allá del porcentaje, supone una ruptura en la evolución bajista y mete ruido en una economía expectante.
Según indicó el informe distribuido por el INDEC, la variación de precios en el año alcanzó el 17,3%, mientras que la comparación interanual se posicionó en 36,6%. La división de mayor aumento en el mes fue Recreación y cultura (4,8%), seguida de Transporte (2,8%), por alzas en Transporte público y Funcionamiento de equipos de transporte personal.
Asimismo, la división con mayor incidencia fue Alimentos y bebidas no alcohólicas (1,9%) por aumentos en Verduras, tubérculos y legumbres, Carnes y derivados y Pan y cereales en las regiones GBA, Pampeana, Noreste, Noroeste y Cuyo. En cambio, en Patagonia la mayor incidencia se registró en Transporte (2,8%).
Las dos divisiones con las menores variaciones de julio fueron Bebidas alcohólicas y tabaco (0,6%) y Prendas de vestir y calzado (-0,9%).
A nivel de las categorías, los precios Estacionales (4,1%) lideraron el incremento, seguidos de Regulados (2,3%) e IPC núcleo (1,5%).