Desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires y la Bolsa de Comercio de Rosario, esperan un piso de rendimiento de 40 quintales, aunque tiene el desafío de superar los anegamientos y las enfermedades.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) señaló que las lluvias tuvieron un impacto mayormente positivo para el trigo, ya que los rindes estimados continúan elevándose y acercándose a los máximos históricos. Ademas, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) indicó que el cereal de la región núcleo tiene un piso de 40 qq/ha, generando mucha expectativa en los productores.
Desde la entidad porteña, manifiestan que no se registraran hectáreas bajo condiciones restrictivas de humedad, “lo que resulta oportuno y beneficioso considerando que las temperaturas están en aumento y el 80% del cereal transita desde encañazón en adelante”. A su vez, colaboradores del NOA informan los primeros lotes recolectados, con rindes que rondan los 10 qq/Ha, alineándose con los valores actualmente proyectados.
Por su parte, la BCR reveló que actualmente, el 85% del trigo de la región núcleo se encuentra entre excelentes y muy buenas condiciones. Hay un 12% bueno y un 3% entre regular y malo. Al comparar con las campañas 2017/18 y la 2021/22 —las mejores de los últimos 16 años, con rindes de 44,6 y 47,3 qq/ha respectivamente— se observa que este año el cultivo llega en una situación más favorable.
Vale recordar que, en el 2017, apenas el 65% del área estaba en condición excelente a muy buena y el 10% se veía comprometido por excesos de agua. En 2021, el 80% del cultivo estaba excelente a muy bueno, pero la falta de lluvias reducía el potencial de rinde en un 2% del área.
Desde la BCR, señalan que “el común denominador ha sido señalar un piso de 40 qq/ha, excepto en la zona de Junín dónde hay severos problemas por anegamientos”. El cultivo está con un 3% en espigazón; 20% con la espiga embuchada; 27% en hoja bandera y el resto en encañazón.
De esta manera, desde la entidad rosarina señalan que las máximas del cultivo serian en Bigand, (proyectan rindes entre 50 y 65 qq/ha, con pisos de 40 qq/ha), en Carlos Pellegrini, dicen: “si se tuviera que cosechar hoy, saldrían trigos de 40 a 50 qq/ha”. En María Susana, los techos alcanzan los 70 y hasta los 80 qq/ha. En Marcos Juárez esperan un promedio de 45 qq/ha, con máximos que pueden superar los 70 qq/ha.
El cultivo llega con excelentes condiciones hídricas en el suelo y de hecho necesita un alivio en estas etapas de las lluvias por el riesgo a que fusariosis ataque la espiga. Si bien sigue lloviendo, los acumulados son más moderados y “después de llover, sale el sol. Hay mucho viento, seca muy rápido. Todo esto baja el riesgo de fusariosis”, señalan los técnicos del área.