Las precipitaciones permitieron mejorar el estado de los cultivos, aunque llegaron tarde para revertir el daño productivo ya que el cereal se deterioraba semana a semana.
La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) rasaltó que las lluvias fueron ampliamente superadoras a los pronósticos, que los lotes regulares a malos pasaron de un 50% a 25% y que detuvieron la caída del rinde, pero los técnicos concuerdan en que las lluvias llegaron tarde para revertir el daño productivo.
Entre el 10 y el 17 de octubre, la región recibió en promedio 60 mm, en un mes que suele dejar 100 mm en 30 días. “Las lluvias fueron ampliamente superadoras a los pronósticos por un frente estacionario que se desplazó muy lentamente”, señalaron los investigadores. Además, en el centro de la región núcleo y el sudeste cordobés, los totales marcados en lo que va de octubre alcanzaron de 80 a 90 mm.
Tras las lluvias, el 45% de los lotes están en buen estado y el 30% muy bueno. Pero en las encuestas de esta semana, los técnicos concuerdan en que las lluvias llegaron tarde para revertir el daño al rendimiento, ya que el 70% del cultivo se encuentra en llenado de granos y el 30% en floración.
En cuanto al maíz faltan por sembrar 730.000 hectáreas. Se trata del 44% del área de intención de maíz. “Las lluvias de la semana pasada, con acumulados reducidos y localizados en el noroeste de la región, permitieron sembrar 80.000 hectáreas después de un mes de paralización por falta de agua”, detallaron.
En lo que respecta a soja, emerge como el cultivo clave esta campaña ya que “los primeros lotes de soja de primera comenzarán a sembrarse la próxima semana, apenas la humedad del suelo lo permita», destacan los técnicos de Carlos Pellegrini.
Además, los asesores resaltan la importancia de sembrar tan pronto sea posible y extenderla hasta mediados de noviembre. “No solo para diversificar riesgos, sino también por cuestiones logísticas. «Este año hay mucha soja para sembrar y debemos evitar un cuello de botella en la cosecha”, manifiestan.