Córdoba: Sigue firme la proyección de aumento de superficie del maíz y girasol

El cereal crecería un 15% con respecto al campaña previa, mientras que la superficie de soja caería. El principal motivo que influye en las decisiones es el precio de los granos y la rentabilidad esperada.

La Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA) realizó una nueva estimación de superficie de los cultivos estivales, y se reafirma la tendencia del aumento de superficie sembrada con maíz y girasol y disminuyen las superficies de soja, maní y sorgo. El principal motivo que influyó en las decisiones fue el precio de los granos, la rentabilidad esperada de los cultivos y la buena disponibilidad de humedad.

De esta manera, el maíz tendrá una superficie de 2.915.600 hectáreas, un 15% más que en la campaña anterior (2024/2025) y un 28% más que el promedio histórico entre los ciclos 2008/2009 y 2024/2025. En el caso del girasol, la superficie crecerá hasta 251.900 hectáreas, lo que representa un aumento del 18% en relación a la campaña pasada y del 357% respecto al promedio histórico.

“La siembra de girasol se inició a principios de septiembre, sin datos aún de avances de esta, y la de maíz habría iniciado también, en la zona sur y sureste, a mediados de septiembre”, detalla el reporte.

La entidad agrega que “al aumentar la superficie de maíz disminuye la de soja por lo que se favorecería la rotación de cultivos, situación que estuvo resentida en la campaña anterior en algunas zonas. Además, algunos lotes también pasarían a girasol”.

La buena disponibilidad de humedad, sumado a la baja presión de chicharrita en la campaña 2024/25, se reflejó en un pequeño aumento de la superficie a sembrar con maíz temprano en el ciclo 2025/26.

En sentido contrario la soja, tendría una superficie de 4.005.900 hectáreas, esto es un 8% menos que en la campaña pasada y 10% menos que el promedio histórico. Mientras que el maní caería un 15% y alcanzará las 266.000 hectáreas, un 10% menos que el promedio histórico. Por último, el sorgo ocupará 147.100 hectáreas, 15% menos que en la campaña pasada.

“La soja, sin embargo, tuvo una disminución en la superficie que se planifica sembrar temprano y un aumento en la proporción de tardía de segunda ya que en esta campaña hubo mayor superficie sembrada con trigo, por lo que los lotes se liberarán más tarde”, señala la entidad.

La caída de superficie sembrada de maní se debe principalmente a factores económicos: bajo precio del grano, altos costos de alquiler y excedentes de stock. “La decisión de muchos productores es esperar mejores precios y condiciones para el año próximo”, sostienen los analistas. Por último, el sorgo perdería la superficie que ganó la campaña pasada con la baja de maíz, volviendo a las áreas marginales donde normalmente se lo siembra.